Así que aprovechando que se hace con ingredientes que fácilmente tenemos en casa y que me encantan los plátanos de Canarias, hace unos pocos días probé a hacerlo y el resultado como siempre, un flan buenísimo 😋.
Para hacer nuestros flanes de plátano necesitaremos unas flaneras, las podéis encontrar fácilmente en ferreterías o tiendas de productos de cocina, nos dara para hacer al menos 8, aparte de eso solo un cazo para hacer el caramelo, una batidora para hacer la mezcla del flan y una bandeja apta para el horno, donde haremos nuestros flanes al baño María, el tiempo que vamos a necesitar, apenas una hora.
Vamos a ello.
Ingredientes:
- Para el caramelo: 150 g de azúcar moreno y 75 ml de agua.
- Medio litro de leche.
- Dos plátanos medianos.
- 5 huevos.
- 120 g de azúcar moreno.
Elaboración:
Encendemos el horno a 180 grados, ponemos a una altura medio baja una fuente apta para el horno con agua hasta la mitad.
Lo primero que haremos será el caramelo, en el cazo ponemos el azúcar moreno y añadimos el agua, calentamos a fuego medio alto mientras de vez en cuando mezclamos estos dos ingredientes moviendo el cazo con movimientos circulares.
Cuando toda la superficie se ponga a burbujear retiramos del fuego, comprobamos que todo el azúcar se ha disuelto y lo repartimos en las flaneras.
Pelamos los plátanos, los troceamos y echamos en el vaso de la batidora, lo trituramos bien hasta que nos quede un puré.
Añadimos el azúcar moreno, la leche y los huevos, con la batidora lo mezclamos hasta integrarlos completamente.
Repartimos la mezcla en las flaneras, pero no la vertemos directamente en ellas, cogemos una cucharilla y sobre el dorso de esta vamos echando poco a poco, para que se mezcle lo menos posible con el caramelo.
Ponemos las flaneras en la bandeja con agua que tenemos en el horno y horneamos al baño María durante 40 minutos, en principio ese tiempo será más que suficiente, pero para asegurarnos de que están hecho clavamos un cuchillo y así vemos si ya está cuajado o no.
Dejamos que enfríen del todo y los metemos en la nevera, los dejamos ahí por al menos 4 horas.
Llegado el momento del postre, cogemos un cuchillo de filo liso y suavemente lo vamos a pasar por todo el borde de cada flan, una vez que terminemos de pasar por todo el borde inclinamos ligeramente el cuchillo hacia el flan, para que entre un poco de aire y se delmolde con facilidad.
Damos la vuelta sobre un plato y agitamos ligeramente para que salga, repetimos con todo los clanes y los repartimos en la mesa.
La mejor parte de cosas, cogemos la cuchilla y a disfrutar.
Pequeños placeres, grandes momentos.
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