Galletas de Navidad de jengibre

 

 

Tras un rato en la cocina ya huele a Navidad en esta casa, no os imagináis que buen aroma a galletas recién horneadas se ha quedado por todos los rincones, sin duda tenía que haber hecho estas galletas de jengibre hace años y eso que tengo los moldes desde hace ya que ni me acuerdo, pero bueno como se suele decir más vale tarde que nunca y sin duda volveré a hacerlas durante estas navidades.

Si vosotros también queréis disfrutarlas tan solo necesitaremos un cuenco grande donde hacer la masa y unos moldes para galletas, con motivos navideños por las fechas en las que nos encontramos.

Vamos a ello.

Ingredientes:

• 150 g de mantequilla. 
• 50 g de azúcar moreno. 
• Un huevo. 
• 70 g de miel. 
• Una cucharadita de jengibre en polvo.
• Una cucharadita de canela en polvo.
• Una cucharadita de nuez moscada en polvo.
• 300 g de harina de trigo para repostería. 
• Una pizca de sal.
• Una cucharadita de bicarbonato de sodio.

 

Elaboración:

Cortamos la mantequilla en dados y los echamos en un cuenco, añadimos el azúcar moreno y con una espátula vamos aplastando la mantequilla y mezclándola con el azúcar, lo mejor es que la mantequilla este a temperatura ambiente para que sea más fácil este paso.

 

Vamos a ir añadiendo los ingredientes restantes, empezamos con el huevo, mezclamos con la espátula después echamos el jengibre, la canela y la nuez moscada y mezclamos de nuevo con la espátula.

Cogemos la miel y la vertemos y mezclamos.

 

Ahora vamos a añadir los ingredientes secos, con un colador grande tamizamos la harina, luego echamos la pizca de sal y la cucharada de bicarbonato, vamos a ir mezclando con la espátula, pero llegara un momento que habrá que terminar de integrarlo todo con la mano, aplastamos la masa varias veces, tranquilos que no se queda pegada en la mano y cuesta bien poco.

Sacamos la masa del cuenco y la ponemos sobre papel film, le damos forma cuadrada y lo envolvemos con el film, lo llevamos a la nevera por al menos dos horas.

 

Encendemos el horno a 180 grados con calor arriba y abajo, sacamos la masa de la nevera y la ponemos sobre una hoja de papel para horno, colocamos otra hoja encima, estiramos la masa hasta que tenga un espesor de unos 4 milímetros, cogemos nuestros moldes para galletas y vamos recortando la masa. 

Con la masa sobrante hacemos una bola y la llevamos a la nevera.

Horneamos durante 15 minutos a una altura medio-baja, el tiempo puede variar ligeramente en función de cada horno, no las perdáis de vista y sacarlas del horno cuando estén doraditas.

Las sacamos del horno y con una espátula las colocamos sobre una rejilla, sacamos el resto de la masa de la nevera y repetimos el proceso para hacer una segunda tanda de galletas, incluso una tercera, como veis da para hacer unas cuantas, 22 en mi caso, que cuando termine de hacer la masa no pensé que iban a salir tantas.

 

Enfrían bastante rápido, las podemos comer ya así directamente o ponernos creativos y decorarlas, yo lo hice con unos lápices pasteleros de diferentes colores que compre en el supermercado, requiere tiempo, pero quedan muy chulas, además de deliciosas, sin duda las de la cabeza de reno son mis preferidas.

Feliz Navidad a todos. 

Pequeños placeres, grandes momentos.