Clafoutis de fresas

 

Hoy ha sido un gran con la familia, hemos estado disfrutando del buen tiempo y poniéndonos finos asando unas costillas, careta de cerdo, etc, para después de todo eso culminar con la tarta que veis y que obviamente me encargue de hacer. 

A muchos ya os sonara este tipo de tarta, hice una similar el año pasado, la clásica clafoutis de cerezas muy conocida y representativa de la repostería francesa y que como he podido descubrir se puede hacer de otras frutas, no tiene porque ser obligatoriamente cerezas, como es el caso de las fresas, que me encantan y no podía dejar pasar la oportunidad de probar a hacerlas con ellas, ya simplemente la pinta que le dan a la tarta la hacen muy apetitosa.

El postre en si no tiene mucho misterio, lleva la fruta y se hace una masa muy similar a la de la crepes, además de los ingredientes necesitaremos para elaborarla un molde bajo de 27 cm de diámetro, unas varillas para ir mezclando los ingredientes y en total apenas una hora para tener hecha esta delicia de tarta. 

Vamos a ello. 

Ingredientes:

• 500 g de fresas. 
• 3 huevos. 
• 150 g de azúcar moreno. 
• Una pizca de sal. 
• 100 g de harina de trigo. 
• 150 ml de nata. 
• 150 ml de leche. 

Elaboración:

Nuestro primer paso será macerar las fresas, las lavamos, quitamos las hojitas y cortamos por la mitad y las ponemos en un plato ondo con 50 gramos del azúcar moreno, con una cuchara les damos un par de vueltas para mezclar bien el azúcar con las fresas y dejamos reposar 15 minutos. 

 

Encendemos el horno con calor arriba y abajo a 180 grados y nos ponemos a hacer la masa.

En un cuenco ponemos los tres huevos con los 100 g de azúcar moreno restantes y la pizca de sal (que ayuda a potenciar el sabor dulce de nuestros posters) cogemos unas varillas y batimos hasta mezclar estos tres ingredientes.

 

Lo siguiente sera incorporar la harina, pero no la vamos a echar toda de golpe, es mejor hacerlo poco a poco, tamizamos un par de cucharadas y removemos, cuando se hayan integrado tamizamos otro par de cucharadas y volvemos remover, asi hasta mezclar toda la harina y que no queden grumos. 

Ahora añadimos la nata, removemos para mezclarla con lo que llevamos hecho, hacemos lo mismo con la leche y ya tendríamos la masa lista

 

 

Como mi molde es desmontable he cogido una hoja de papel para horno, la he humedecido y hecho una bola, con las manos la he apretado bien para que escurra el agua, nos queda como una tela, luego la he colocado en el molde y he  recortado lo que sobresale, si el vuestro es cerrado bastará con untarlo con un poco de mantequilla. 

Colocamos las fresas en el molde y vertemos la masa sobre ellas. 

 

 

Con mucho cuidado lo introducimos en el horno a una altura media-baja y lo horneamos entre 40 y 45 minutos, hasta que al clavarle un palillo este salga limpio, como podeis ver se hincha un poco durante el horneado pero tranquilos que no se va a salir del molde.

Una vez hecho lo sacamos del horno y dejamos que se enfrie.

 

Una vez frio del todo llevamos la tarta a la nevera hasta el momento del postre, que este al menos unas tres horas, siempre suelo hacer estos postres el día anterior para dejarlos en la nevera toda la noche.

Justo antes de servirla espolvoreamos un poco de azúcar glas por encima a nuestro gusto y a disfrutar. 

Pequeños placeres, grandes momentos.