No me cansaré de decir que hay que sacar un rato de vez en cuando, meterse en la cocina y preparar un buen bizcocho casero, que se pueden comprar por ahí y los habrá muy buenos, seguro, pero es que cuando lo haces tú lo vas a disfrutar infinitamente más, además que tendras la posibilidad de probar la masa antes de meter el bizcocho en el horno y personalmente es algo que me encanta.
¿Y por qué os comentó todo esto? Porque hoy os traigo un bizcocho que así de primeras os comentó que se ha convertido en unos de mis favoritos, no sólo por lo esponjoso y lo bueno que esta, que me encanta el chocolate y la gran combinación que hace con plátano me parece algo increíble, si no sobre todo por su presentación, es que es verlo y querer incarle el diente, mirar que bien queda ese plátano que lo corona y que le da un toque muy distintivo, tan diferente.
Una hora, ese es el tiempo que vamos a tener que invertir en tener listo este bizcocho, nos hará falta un batidor-amasador o en su lugar una batidora con varillas, un molde rectangular tipo plumcake de 24x11x8 cm y los ingredientes que vienen a continuación, es importante que estén a temperatura ambiente.
Vamos a ello.
Ingredientes:
- 2 huevos.
- 125 g de azúcar moreno.
- 3 plátanos medianos.
- 75 ml de aceite de oliva.
- 60 ml de leche.
- Una cucharada de aroma de vainilla.
- 180 g de harina para repostería.
- 30 g de cacao en polvo.
- 5 g de levadura en polvo.
- Una pizca de sal.
Elaboración:
Primero de todo encendemos el horno a 180 grados con calor arriba y abajo.
Ahora vamos a empezar por pelar dos de los plátanos, los troceamos y echamos en el vaso de la batidora, lo trituramos hasta tener un puré y reservamos para más adelante.
Ahora cogemos los huevos y el azúcar moreno y los vamos a batir a velocidad alta durante 5 minutos, para que doble su tamaño.
Lo siguiente será incorporar primero el aceite de oliva y la leche, batimos un par de minutos a velocidad media y seguidamente añadimos el puré de plátano y el aroma de vainilla, batimos de nuevo un par de minutos a velocidad media.
En un cuenco mezclamos la harina (se puede utilizar harina de trigo normal si no tenéis harina para repostería) con el cacao y la levadura en polvo, si no podéis pesar 5 gramos de levadura en polvo como veis en la imagen es una cucharadita, tamizamos sobre lo que llevamos hecho de la masamasa y añadimos también la pizca de sal que ayudará a realzar el sabor dulce de nuestro bizcocho.
A velocidad baja o bien con unas varillas de mano vamos a integrar los ingredientes secos con la masa, que no queden grumos.
Forramos el molde con papel para horno o bien lo untamos con mantequilla y lo enharinamos, lo que prefirais, vertemos la masa en el molde, le tendremos que dar con una espátula para que caiga toda y así la aprovechamos al máximo, movemos un poco el molde de izquierda a derecha para que se
alise la superficie y le damos un par de golpecitos sobre la encimera para que
libere las posibles burbujas.
Pelamos el plátano que nos quedaba, lo cortamos por la mitad a lo largo y lo ponemos sobre la masa bocabajo.
Lo llevamos al horno a una altura medio-baja durante 45 minutos.
Como cada horno es distinto el tiempo de horneado puede variar ligeramente, cuando lleve 40 minutos y no antes (importante, que sino echaríamos a perder el bizcocho) podemos comprobar si ya está hecho clavándole un palillo o un cuchillo, si sale limpio es que ya está, si no lo dejamos 5 minutos más y volvemos a comprobar.
Una vez hecho apagamos el horno y lo
sacamos, dejamos que se temple 20 minutos y lo desmoldamos, lo mejor es
ponerlo sobre una rejilla para que termine de enfriar y no se forme
humedad en la base.
Ya solo queda el paso más relevante, coger un cuchillo, cortar un buen trozo y saborearlo acompañado de un buen café, por ejemplo, lo vais a disfrutar mucho, os lo aseguró.
Pequeños placeres, grandes momentos.
Por último os animó a seguirme en las distintas redes sociales, las tenéis en la parte superior derecha, ahí podéis preguntarme dudas sobre algún postre, estar al tanto de las novedades, etc.
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