Parece que fue hace nada cuando compre cuatro tabletas de turrón con el objetivo de ir usándolas a lo largo de este año para ir haciendo distintos postres y así casi sin darnos cuenta estamos a 23 de Diciembre y hoy he utilizado la última de esas tabletas para hacer estas galletas, se ha completado el círculo y yo me pregunto ¿cuántos turrones guardaré esta vez para hacer postres 2021? el tiempo lo dirá.
Bueno vamos a centrarnos, para hacer estas galletas necesitamos una batidora con varillas, un rodillo (bien se puede usar una botella de cristal para ello) y un vaso para darle la forma a nuestras galletas, pero si tenéis moldes cortadores para galletas podéis usarlos, a mi me ha dado para hacer 21 galletas.
Vamos a ello.
Ingredientes:
- 50 g de azúcar moreno.
- 100 g de mantequilla.
- 200 g de turrón blanco de almendra.
- Un huevo.
- Una pizca de sal.
- 250 g de harina de trigo.
Elaboración:
Por un lado vamos a mezclar la mantequilla con el azúcar, calentamos la mantequilla un minuto en el microondas a baja potencia para que este blandita, le añadimos el azúcar moreno y lo vamos a batir con la batidora con varillas, primero renovemos manualmente y luego ya le damos caña hasta tener una mezcla cremosa.
Por otro lado en el vaso de la batidora echamos el turrón troceado y el huevo, lo trituramos con la batidora, nos quedará una crema bastante espesa, costará un poco despegarla de la batidora.
Añadimos la crema de turrón a la mantequilla con azúcar y removemos con una espátula, esta parte pensaba que iba a costar más, al ser la crema de turrón muy espesa, pero se mezcla facilmente y en un momento.
Tamizamos la harina sobre la mezcla anterior y añadimos la pizca de sal, empezamos a remover con la espátula, pero ahora toca ensuciarse las manos y amasar hasta que se integre bien la harina con el resto de ingredientes y hacemos una bola, envolvemos en papel film y me gusta hacerlo con forma de ladrillo para el paso siguiente, lo metemos en la nevera al menos un par de horas.
Pasadas las dos horas encendemos el horno a 180 grados con calor arriba y abajo, sacamos la masa de la nevera, la sacamos del papel film y ponemos sobre una hoja de papel para horno, ponemos otra hoja de papel parea horno encima y pasamos el rodillo hasta estirar la masa que tenga unos 3 milímetros de grosor, la forma de ladrillo facilita esta parte.
Ahora vamos a recortar nuestras galletas, he cogido un vaso de 7 cm de diámetro y he vamos marcando sobre la masa, aprovechando al maximo, luego las vamos poniendo sobre una bandeja del horno y con la masa sobrante hacemos otra bola y volvemos a pasar el rodillo, para aprovechar bien toda la masa.
Metemos la bandeja en el horno a altura medio-baja y las horneamos durante 15 minutos, sacamos la bandeja del horno y con cuidado y con ayuda de una espátula las ponemos sobre una rejilla para que enfríen, si hay más galletas que hacer las ponemos en la bandeja y vuelta al horno.
En apenas 15 minutos se habrán enfriado y están listas para comer, van perfectas para la hora del café, como he comentado arriba me ha dado para hacer 21 galletas, eso dependerá del tamaño de las galletas pero como veis da para bastantes.
Pequeños placeres, grandes momentos.
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