Arroz con leche y crema de orujo

En un principio ayer por la tarde tenía en mente hacer arroz con leche y nata, de hecho cuando fui a hacer la compra hace unos días traje todo lo necesario con esa idea, pero justo cuando estaba a punto de empezar, en un giro inesperado de los acontecimientos, vi la botella de crema de orujo de cuando hice un flan de este sabor hace bien poco y me entro curiosidad por ver que tal quedaba si se lo añadía a este postre, pero bueno tranquilos todos que el arroz con leche y nata acabará llegando a este blog antes de que acabe el año fijo. 

Se consigue combinar el arroz con leche tradicional con ese agradable sabor a crema de orujo, que en un principio cuando lo pruebas no lo notas de primeras, notas más la canela y los sabores aromáticos a limón y naranja, ya hacia el final de cada cucharada ahí es cuando la crema de orujo toma protagonismo y te deja ese agradable regustillo, toda una experiencia que no podéis dejar pasar.

Hacerlo nos va a llevar menos de una hora, básicamente necesitaremos una cazuela y unos vasitos o cazuelitas de barro para servirlo, nos va a dar para hacer para 8 personas.

Vamos a ello.

  

Ingredientes: 

• 150 g de arroz redondo.
  
• 1,3 litros de leche.
• 200 ml de crema de orujo.
• Una rama de canela.
• Un trozo de piel de naranja y otro de piel de limón.
• 100 g de azúcar moreno. 

Elaboración:

En primer lugar vamos a poner el arroz a remojo para que suelte parte del almidón, así nos aseguramos que no nos quedé duró al cocinarlo. 

Cuando lleve 15 minutos a remojo vamos a coger una cazuela, en ella echaremos la leche, la crema de orujo y pondremos la rama de canela y las pieles de limón y naranja, de unos 10 cm cada uno e importante quitarle la parte blanca interior que amarga y nos echaría el postre a perder.

 

Calentamos a fuego medio-alto durante 10 minutos, vigilando que no llegue a hervir la leche, pasado ese tiempo añadimos el azúcar moreno y removemos 2 minutos, casi siempre uso panela en mis postres, es como un azúcar moreno más puro y natural, sin refinar, que aporta un sabor acaramelado muy agradable, bajamos a fuego medio, escurrimos el arroz y lo incorporamos, removemos otro par de minutos.

 

Lo vamos a cocer durante media hora, removiendo cada 5 minutos y estaremos pendientes de que no hierva, de ser así bajamos un poco el fuego.

A medida que se va haciendo probaremos para ver como va de hecho y por si queremos añadir un poco más de azúcar, aunque con los 100 g le llega bien.

 

Una vez hecho retiramos la rama de canela y las pieles y pondremos el arroz con leche en una bandeja para que enfríe y lo cubriremos con papel film en contacto con la superficie para que no se forme costra, una vez frio lo metemos en la nevera al menos 5 horas.

Cuando vayamos a servirlo sacamos la bandeja del horno, lo repartimos en los vasitos, ramequines o cazuelitas de barro donde queremos ponerlos y podemos espolvorear un poco de canela en polvo sobre cada una que le da su toque.

Llegados a este punto solo queda saborear este arroz con leche y disfrutarlo de principio a fin, como habéis visto cuesta poco hacerlo y es muy sencillo, se puede preparar cualquier día de la semana. 

Pequeños placeres, grandes momentos.