Tortitas con pepitas de chocolate

Una situación excepcional como la que estamos viviendo, con el confinamiento debido al Covid19, requiere una afición de lo más variada para distraernos y romper la monotonía de estos días, como es la repostería, lógicamente no podía recomendaros otra cosa, es lo mío, si estáis en este blog ya lo sabéis.

Estaba esta tarde viendo le tele mientras revisaba que postres había hecho en los últimos meses y echaba en falta unas tortitas, como comente cuando hice el bizcocho de chocolate hace unos días no descartaba hacer un postre más antes de que acabara el mes y sabiendo lo que tenia en casa me ha faltado tiempo para ir la cocina y ponerme a preparar unas (eso si lavándome las manos a conciencia previamente), tenia que hacerlas diferentes así que a estas les incorpore unas pepitas de chocolate y las hice de tal forma que me quedaran lo más esponjosas posibles.

Este es un postre para disfrutar al momento, es preparar la masa, para lo cual necesitaremos un cuenco donde mezclar los ingredientes, unas varillas y hacer las tortitas en una sartén con ayuda de una espátula, en apenas 15 minutos podréis estar disfrutando de estas tortitas, da para hacer entre al menos 5 o 6 tortitas, dependiendo del tamaña que les demos, si queréis hacer más pues usar el doble de cantidades de cada ingrediente.

Recordaros que un punto importante de esta receta es que los ingredientes estén a temperatura ambiente.




Ingredientes:

• Un huevo.
• 100 ml de leche.
• 50 g de azúcar moreno.
• Una pizca de sal.
• 125 g de harina para repostería.
• Una cucharadita colmada de levadura en polvo.
• Una cucharadita de aroma de vainilla.
• 40 g de pepitas de chocolate.

Elaboración:

Hacer la masa de las tortitas nos va a llevar muy poco tiempo así que vamos a poner primero una sartén a fuego medio para que se vaya calentando.

En un cuenco echamos el huevo, la leche, el azúcar moreno y la sal, tamizamos la harina, si no tenéis harina para repostería podéis usar de trigo normal, con la que es especial para repostería conseguiremos que nos queden más esponjosas, os recomiendo usar esa.

Cogemos las varillas y removemos hasta mezclarlo bien y que no nos queden grumos, el resultado será una masa en un punto intermedio entre líquida y espesa, seguidamente añadimos las pepitas de chocolate, removemos para distribuirlas por toda la masa.

La sartén ya debería tener la suficiente temperatura, ponemos una cucharadita de mantequilla, la inclinamos de un lado a otro para que la mantequilla se reparta por toda la base.

Cogemos masa con un cucharon y la vertemos en el centro de la sartén, que nos quede una tortita de entre 10 y 12 cm, cuando veamos que la superficie se llena de burbujas le damos la vuelta con la espátula, la hacemos lo justo por este lado para que se dore a nuestro gusto, levantándola por un lado con la espátula podremos ver como va, una vez hecha la retiramos a un plato.

La primera será de prueba para calcular el tiempo que necesitan por cada lado.

A medida que las vamos haciendo las apilamos en un plato para mantenerlas calientes.

Servimos al momento que es cuando mejor están, las notareis super esponjosas y con las pepitas de chocolate aun fundiéndose, toda una experiencia para el momento del postre.

Las podéis acompañar de un poco de helado, nata, echarles sirope por encima o como he hecho yo comerlas así directamente, esta pero que muy buenas.

Disfrutadlas.

Pequeños placeres, grandes momentos.