domingo, 15 de julio de 2018

Panna cotta de chocolate blanco con coulis de mango

Ayer estuvimos de celebración por el cumpleaños de mi hermano y le di una pequeña sorpresa haciendo uno de los postres que más le gusta de este blog, que de hecho conoce gracias a que hace tiempo me puse a investigar e hice la panna cotta de vainilla, con ese coulis de frambuesa con la que hacía tan buena combinación. 

Y para esta celebración he hecho una panna cotta de chocolate blanco acompañada de coulis de mango que también combinan a la perfección y que en apenas 30 minutos podréis tener hecha toda la elaboración, luego solo hay que dejarla enfriar en la nevera, a mi me sigue sorprendiendo con que facilidad se hace este postre y lo bien que queda. 

Vamos a necesitar una cazuela, una batidora, un colador y los moldes para las panna cottas. 


Ingredientes:


- Para la panna cotta:

  • 500 ml de nata.
  • 600 ml de leche.
  • 50 g de azúcar moreno.
  • 8 hojas de gelatina.
  • 180 g de chocolate blanco.
- Para el coulis:
  • 2 mangos.
  • 75 ml de agua.
  • 25 ml de zumo de limon.
  • 40 g de azúcar moreno.


Elaboración:


Si ya habeis visto las otras recetas de panna cottas que hay en el blog comprobareis que el proceso para hacerla es siempre el mismo, en una cazuela echamos la nata, la leche y el azúcar moreno y lo calentamos a fuego medio, removiendo de vez en cuando.


Mientras esto se calienta ponemos a hidratar las hojas de gelatina en un cuenco con agua.


Cuando veamos que va a comenzar a hervir retiramos del fuego y echamos las hojas de gelatina bien escurridas, removemos hasta que se disuelvan completamente.


A continuación añadimos el chocolate blanco troceado y vovlemos a remover hasta que el chocolate se funda e integre por completo.


Podemos verter la mezcla en una jarra para que nos sea más facil repartirlo en los moldes, da para hacer entre 10 y 12 panna cottas dependiendo del tamaño de los moldes, dejamos que se templen y los metemos en la nevera al menos 4 horas.


Ahora nos ponemos a hacer el coulis, empezamos pelando los mangos y troceandolos en dados pequeños.


Después en una cazuela echamos los trozos de mango, el agua, el zumo de limon y el azúcar moreno, lo ponemos a calentar a fuego alto y removemos de vez en cuando para que no se pegue. 

Cuando comience a hervir bajamos el fuego a medio-bajo y lo tenemos asi 10 minutos, removiendo con frecuencia durante ese tiempo. 

Lo trituramos bien con una batidora y lo colamos en un tarro, dejamos que enfrie y lo metemos en la nevera también unas 4 horas por lo menos. 

Para servirlo ponemos agua caliente en un cuenco e introducimos los moldes unos 5 segundos, el calor ayudará a desmoldarlos con facilidad sobre los platos, si veis que no sale la panna cotta del molde lo ponéis otros 5 segundos en el agua caliente. 

Luego les ponemos coulis a nuestro gusto y estarán listan para comer, que las disfrutéis. 
Pequeños placeres, grandes momentos.




receta Panna cotta de chocolate blanco con coulis de mango Siempre hay hueco para el postre

martes, 10 de julio de 2018

Helado de kiwi

Con tan solo 4 ingredientes y sin tener que utilizar una heladera vamos a hacer un cremoso helado de fruta natural y para el estreno de esta categoría me he decantado por hacerlo de kiwi, aunque se puede probar a hacer de cualquier fruta, usando las mismas cantidades y el método para hacerlo seria el mismo.

Para hacer nuestro helado solo vamos a necesitar un cazo, un cuenco grande y una batidora.


Ingredientes:
  • 300 gramos de kiwi (2 o 3 kiwis).
  • 100 g de azúcar moreno.
  • 250 g de queso mascarpone.
  • 250 g de yogur griego.

Elaboración:

Empezamos pelando los kiwis (he utilizado de la variedad de kiwi amarillo) y troceándolos menuditos, los echamos en el cazo junto con el azúcar y lo calentamos a fuego medio durante 15 minutos, removemos cada 2 minutos más o menos.

Pasados los 15 minutos retiramos del fuego y lo trituramos con una batidora en el mismo cazo, dejamos que se temple unos 10 minutos.

En un cuenco grande echamos el mascarpone y el yogur griego, lo batimos con una batidora con varillas hasta que este bien mezclado.

Vertemos la mezcla del cazo sobre el mascarpone y yogur griego y lo mezclamos bien con una cuchara hasta que se integren bien todos los ingredientes.

Ahora lo echamos en un recipiente, preferiblemente con tapa si no lo cubrimos con papel film, lo metemos en el congelador por lo menos 6 horas.

Cuando vayamos a servirlo lo sacamos 30 minutos antes para que no este duro como una piedra.

Hacemos unas bolas con un par de cucharas lo mejor que podamos y las servimos, a mi no es que me hallan quedado como tenia en mente pero lo que realmente importa es el sabor y la cremosidad de este postre.

Pequeños placeres, grandes momentos.