Tortitas

Las tortitas son muy populares en Estados Unidos y allí les encanta empezar el día desayunando unas buenas tortitas para cargar pilas, yo las he hecho en varias ocasiones con mis hermanos para el momento del postre después de la comida o la cena, de hecho fue mi hermano Alberto el que se aficionó a hacerlas y ya les iba tocando aparecer en este blog, gracias por la idea. 

Para hacerlas vamos a necesitar la batidora, el vaso de la batidora y una sarten para hacer las tortitas y como vais a ver los ingredientes son muy comunes por lo que podemos prepararlas siempre que queramos. 

Ingredientes:

• Un huevo. 
• 250 ml de leche. 
• 150 g de harina de trigo. 
• Una cucharadita de levadura. 
• Una pizca de sal. 
• Una cucharada de mantequilla.

Elaboración:

Está es la receta más sencilla para hacer unas tortitas, hay más formas y con el tiempo os las iré enseñando. 

Echamos el huevo, la harina, la leche y la pizca de sal en el vaso de la batidora, batimos durante un par de minutos, que se mezclen bien todos los ingredientes. 

Dejamos que la masa repose 10 minutos.

Ponemos una sarten a fuego Medio-alto y ponemos una cucharada de mantequilla en el centro.

Cuando esté fundida bajamos a fuego medio y vertemos masa en el centro, dejando que se distribuya ella sola por la sarten. 

Cuando empiecen a salir burbujas le damos la vuelta con una espátula, dejamos que se haga por este lado medio minuto y la retiramos a un plato. 

La primera tortita es de prueba, así controlamos la temperatura de la sarten y absorberá el exceso de mantequilla fundida. 

Una a una vamos haciendo las tortitas y poniéndolas apiladas en un plato, con estas cantidades da para hacer 6.

Las servimos y que cada cual las acompañe con lo que más le apetezca, como podéis ver en la foto le he puesto sirope de chocolate, un poco de nata montada y algunos trocitos de fresa, limpio he dejado el plato, buenísimas. 

Pequeños placeres, grandes momentos.

Bizcocho de limón y mascarpone

Como hace unos días fue mi cumpleaños hoy me tocaba llevar algo dulce al trabajo para compartir con mis compañeros, estando ellos al tanto de mis pinitos en la repostería no me podía negar. 

Y si hay algo sencillo de hacer para estas ocasiones, que se puede llevar con facilidad por la calle y que con casi toda probabilidad triunfareis, es un bizcocho, me encanta hacerlos. 

Vamos a necesitar una batidora con varillas y un molde, como de costumbre he usado el molde rectangular de 24x11x8cm. 

Ingredientes:

• 4 huevos.
• 125 g de azúcar moreno.
• 250 g de queso mascarpone.
• 200 g de harina de trigo.
• 15 g de levadura.
• 100 ml de zumo de limón.
• Ralladura de un limón.
• 100 ml de aceite de oliva.

Elaboración: 

Vamos a empezar encendiendo el horno por arriba y abajo a 180 grados, para que vaya cogiendo temperatura mientras hacemos la masa que nos llevara menos de 10 minutos.

Batimos los huevos con el azúcar moreno durante 5 minutos con la batidora con varillas.

Añadimos el zumo de limón, el queso mascarpone, el aceite de oliva y la ralladura de limón y batimos un par de minutos.

Mezclamos la harina con la levadura y lo tamizamos sobre la mezcla anterior, removemos con una cuchara haciendo movimientos envolventes hasta que esta todo bien mezclado.

Engrasamos el molde con mantequilla y lo enharinamos, echamos ahí la masa, agitamos un poco el molde de izquierda a derecha para distribuirla de manera uniforme y lo metemos en el horno a una altura medio-baja, ponemos el calor solo abajo y lo horneamos 50 minutos.

A los 45 minutos podremos ir comprobando si ya esta listo clavandole un cuchillo, cuando salga limpio sera el momento de sacarlo.

Dejamos que enfrié, desmoldamos y a comer, vais a venir que bueno y esponjoso nos queda, que lo disfrutéis. 

Me encanta el olor a bizcocho recién hecho que impregna toda la casa. 

Pequeños placeres, grandes momentos.

Panna cotta de crema de whisky rellena de crema de café

Hoy sumo un nuevo año en mi colección particular y para celebrarlo me apetecía algo especial, me he decantado por la panna cotta, un postre que creo que de no haber sido por iniciar mi aventura repostera jamas habría descubierto, me he aficionado tanto a hacerlas que al final he decidido crearles su propia categoría dentro de las etiquetas del blog.

Si sois de los que se pide un cortado con crema de whisky y hielo a la hora del café seguro que este postre encaja en vuestros gustos. 

Con estos ingredientes me ha dado para hacer 10 panna cottas, puede variar en función del tamaño de los moldes.


Ingredientes:

- Para la panna cotta:

• Medio litro de nata.
• 500 g de queso mascarpone.
• 300 ml de crema de whisky.
• 100 g de azúcar moreno.
• Una cucharada de aroma de vainilla.
• 9 hojas de gelatina.

- Para la crema de café:

• 2 yemas de huevo.
• 40 g de azúcar moreno.
• 125 ml de leche.
• 100 ml de café.
• 40 g de harina fina de maíz.

Elaboración:

Empezamos poniendo las hojas de gelatina en un cuenco con agua para que se hidraten.

En una cazuela ponemos la nata, el queso mascarpone, el azúcar moreno y el aroma de vainilla, lo calentamos a fuego medio durante 15 minutos, sin dejar de remover con unas varillas para integrar bien estos ingredientes, que no hierva, retiramos del fuego. 

Escurrimos las hojas de gelatina y las echamos en la cazuela, removemos con las varillas para que se disuelvan.

Repartimos la mezcla en los moldes, dejamos que templen y los metemos en la nevera unas 6 horas antes de rellenarlos.

Para hacer la crema de café echamos en un cuenco las yemas de huevo y el azúcar moreno, batimos durante 5 minutos con una batidora con varillas.

Añadimos la leche, el café (mejor si esta recién hecho) y la harina fina de maíz tamizada, removemos bien con una cuchara y echamos esta mezcla en un cazo.

Lo calentamos a fuego medio sin dejar de remover con las varillas hasta que espese, unos 15 minutos más o menos, retiramos del fuego y removemos unos 5 minutos más.

Ponemos la crema en una manga pastelera o un biberón de cocina.

Sacamos las panna cottas de la nevera y con una cucharilla vaciamos el centro de una y las rellenamos con la crema, echamos los trozos que les quitamos en una cazuela y los calentamos a fuego medio, cuando se deshagan dejamos que templen y cubrimos las panna cottas rellenas.

De nuevo las metemos en la nevera un par de horas al menos.

Cuando vayamos a servirlas ponemos agua caliente en un cuenco, pasamos un cuchillo por el borde para despegar la panna cotta e introducimos el molde 3 segundos y desmoldamos cada una en un plato.

Lo mejor es no decirle a la gente que va a probarla de que son, mejor que lo descubran ellos mismos.

Aquí ha sido todo un triunfo, espero que la disfrutéis.

Pequeños placeres, grandes momentos.

Pudin de manzana granny smith

He escuchado decir a mi hermana varias veces que el nombre de este postre le sonaba mal, yo creo que no hay que juzgar un libro por sus tapas y le he dado una oportunidad al pudin (el primero de su categoría en el blog), he hecho uno de manzana y he de decir que la experiencia ha sido muy positiva, ha gustado bastante. 

A simple vista parece un flan pero es de textura mucho más consistente al llevar sobaos entre sus ingredientes y además tiene una buena combinación de sabores gracias a la canela, limón, naranja y sobretodo la manzana claro esta, una delicia. 

Para elaborarlo necesitaremos una batidora y un molde, unos 20 minutos de preparación y luego hacerlo en el horno. 


Ingredientes:

Para el pudin:

• Medio litro de leche.
• Una rama de canela. 
• Piel de limón.
• Piel de naranja. 
• 4 huevos. 
• 3 manzanas granny smith. 
• 100 g se azúcar moreno. 
• 25 g de mantequilla. 
• 12 sobaos. 

Para el caramelo:

• 100 g de azúcar moreno. 
• 40 ml de agua.

Elaboración:

El primer paso será aromatizar la leche, echamos la leche en un cazo, junto con la rama de canela y las pieles de limón y naranja (de unos 10 cm cada una), que no lleven parte blanca.

Lo calentamos a fuego medio-alto hasta que empiecé a hervir, retiramos del fuego y dejamos que temple.

Mientras la leche se calienta aprovechamos para hacer el caramelo, ponemos una sarten pequeña a fuego alto, añadimos los 100 g de azúcar y los 40 ml de agua, cuando veamos que va a empezar a hervir retiramos del fuego y movemos la sarten para que el azúcar se disuelva del todo, luego lo vertemos en el molde. 

Encendemos el horno a 180 grados, con calor arriba y abajo, metemos una bandeja con agua donde luego pondremos el molde con el pudin a hornear al baño maría. 

En una sarten pequeña a fuego medio echamos la mantequilla, cuando este fundida echamos las manzana cortada en dados y 50 g de azúcar moreno, removemos con una cuchara y subimos a fuego alto, así durante 10 minutos y removemos cada par de minutos para que se haga bien todos los trozos de manzana. 

Colamos la leche en un cuenco grande, añadimos los huevos, 50 g de azúcar moreno y los sobaos desmigados, batimos con la batidora hasta mezclarlo bien.

Añadimos la manzana y removemos con una cuchara, luego vertemos la mezcla en el molde y lo horneamos al baño maría durante una hora a una altura medio-baja.

A partir de que lleve 50 minutos podemos comprobar si está hecho clavandole un cuchillo, cuando salga limpio lo podremos sacar del horno, cubrirlo con papel albal si veis que la superficie se pone muy dorada. 

Dejamos que enfríe y lo metemos en la nevera. 

Cuando llegue el momento del postre lo sacamos de la nevera, pasamos un cuchillo por el borde para despegarlo y desmoldamos, ya solo queda disfrutarlo. 

Pequeños placeres, grandes momentos. 

Tartaletas de crema catalana

En el postre de esta semana os traigo una forma diferente de degustar la tradicional crema catalana, en vez de servirlos en unos cuencos bajos la vamos a poner en unas tartaletas, a modo de pastelitos. 

Hay que ver como me he aficionado a utilizar el soplete de cocina para darle el toque final a los postres, tengo que decir que es un utensilio de cocina al que, sí os aficionais a la repostería, se le acaba sacando bastante partido. 


Ingredientes:

• 8 tartaletas. 
• 400 ml de leche. 
• Una rama de canela. 
• Piel de medio limón. 
• 2 yemas de huevo. 
• 75 g de azúcar moreno. 
• 20 g de harina fina de maiz. 

Elaboración:

Cogemos un cazo y echamos la leche junto con la rama de canela y la piel de limón, importante que no lleve parte blanca.

Lo ponemos a calentar a fuego alto y removemos de vez en cuando mientras se calienta, cuando empiece a hervir retiramos del fuego y colamos la leche.

En un cuenco echamos las dos yemas de huevo, las batimos y a continuación añadimos el azúcar moreno y la harina fina de maiz, mezclamos con una cuchara hasta integrar bien los 3 ingredientes.

Ponemos la leche aromatizada en un cazo y le añadimos la mezcla anterior, lo calentamos a fuego medio-bajo mientras lo removemos lentamente pero sin parar con unas varillas hasta que espese, unos 20 minutos. 

Puede tardar algo más pero no tengáis prisa en este punto, es importante que se haga a fuego lento para que se cocine bien.

Removemos hasta que espese, en ese momento retiramos del fuego y removemos durante 2 minutos más, después lo cubrimos con papel film de modo que el plástico toque la crema para que no se forme costra mientras se enfría.

Una vez que ha templado lo repartimos con ayuda de una cuchara entre las 8 tartaletas y las metemos en la nevera, las tartaletas las podréis encontrar fácilmente en cualquier supermercado. 

Cuando vayamos a servirlos espolvoreamos azúcar por encima de la crema y lo caramelizamos con el soplete, el toque final como con la crema catalana tradicional. 

Espero que disfrutéis de estos deliciosos bocaditos. 

Pequeños placeres, grandes momentos.